Año 1780. España y Gran Bretaña, los dos imperios que se disputan el mundo y sus océanos, vuelven a estar en guerra. Gibraltar es asediada por tierra y por mar, en un intento por recuperar el Peñón perdido con el Tratado de Utrecht, mientras que, en América, España se pone del lado de las rebeldes Trece Colonias contra el rey inglés.