Las bóvedas tabicadas son, probablemente, la variante más conocida del amplio muestrario de técnicas de albañilería autoportantes concebidas para el cubrimiento de espacios usando ladrillos o piedras de laja y evitando el empleo de cimbras. Desde hace más de mil años, esta solución ha entusiasmado a muchos constructores por su versatilidad.