El discurso sobre lo público y todo lo que se le asocia (espacio, conducta, modos, apariencia y gestión) presenta tintes de crisis permanente ante la tendencia contraria de privatización y domesticación. Los debates están muy centrados en la gestión y la propiedad del espacio público. Sin embargo, lo que convierte a un espacio en público no es solamente su modelo de gestión o de propiedad, aunque también y en gran medida, sino lo que sucede en él.