Este conjunto de textos, a modo de cuentos, analiza la soledad en la arquitectura a través de los arquitectos Frank Lloyd Wright, Adolf Loos y Le Corbusier, quienes en momentos importantes de su vida se sintieron solos. Wright, mientras enterraba-abrazaba a Mamah Bouton Borthwick después del incendio provocado en Taliesin I en 1914, Loos, justo antes de enseñarle a Lina Loos su obra El dormitorio de mi esposa (1903), y Le Corbusier, durante los instantes de su ahogamiento en Cap-Martin en 1965.