Formas de ver y de habitar están interrelacionadas en la representación fotográfica de la arquitectura. Más allá de las dos dimensiones de su soporte físico, la imagen contiene un espacio interior. Distinguimos visualmente elementos materiales y planos de profundidad, pero entre todos ellos hay otro tipo de espacios, hay vacíos. De modo similar al lenguaje binario que se expresa con secuencias de 0 y 1, nuestra mirada rastrea y separa objetos sólidos, espacios intermedios, huecos y silencios.