Para poder hacer una bolsa Burulan hay que recorrer un largo camino, que va desde País Dogon y Segou (Mali), hasta Sabadell, a lo largo del cual los métodos de cultivo del algodón y tejido y teñido de las telas, unido a un diseño respetuoso con las tradiciones y con el medio ambiente, configuran este producto, idóneo para conservar un alimento básico tan antiguo como la humanidad. De algodón 100% orgánico teñido con tintes naturales de plantas, cortezas de árboles y barro del río Níger. Medidas: 25x57-84 cm (asa corta-larga).